Tal como pone el marcapáginas en su reverso, en abril de 1925 Federico García Lorca visita Figueres convidado por su amigo Salvador Dalí. Delante de la familia y los amigos lee el manuscrito de Mariana Pineda. Dos años más tarde, el artista figueirense dibuja los decorados de la obra del poeta. "Las decoraciones del noy son deliciosas", escribe Lorca en una carta a Anna María Dalí.
Este punto de Sant Jordi 2025, del Ajuntament de Figueres, rememora esta historia, reproduciendo uno de estos dibujos de Salvador Dalí.
Lorca y Dalí en Cadaqués en 1927.
"Canción otoñal", Federico García Lorca.
Gracias, Montse.
Belíssimo post, Justa!
ResponderEliminarE já acabou a festa, não é?
Apertas🍂🍁
Acaba hoy, María 😔. Ahora viene la cuesta hasta Navidad, que esperemos sea poco pronunciada.
EliminarUm abraço.
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ResponderEliminarNo me he expresado bien : Efectivamente la ilustración es deliciosa y el marcapáginas, por consiguiente, También
EliminarApertas
A mí también me encanta, tanto por su estética como por lo que representa.
EliminarApertas.
Interessantíssimo. Bela entrada.
ResponderEliminarBom domingo!
Gracias, Manuela.
EliminarUm abraço.
Muy muy bonito.
ResponderEliminarFeliz domingo
Igualmente, Javier. Por aquí en el último día de los festejos de San Froilán.
ResponderEliminarAbrazoSS
Muy bonito el mps dedicado a estos dos genios. Ambos, de mis preferidos en sus artes
ResponderEliminarUn abrazo