PRIMEROS CLÁSICOS

 

De Jane Austen:

Orgullo y prejuicio.

"Por una persona en concreto no debes trastocar el significado de principio y de integridad, ni intentar convencerte a ti misma o a mí de que el egoísmo es prudencia o de que la insensibilidad ante el peligro es un seguro de felicidad"

Y Enma:

"Que la gente buena se encuentre...! ¡Y siempre termina encontrándose!"

De las hermanas Bronte:

Emily, Cumbres Borrascosas.

"Te has portado tan bien, que te amo tanto como si fuera digno de tu amor"

Charlotte, Jane Eyre.

"Desde el punto de vista físico, me sentía impotente, pero me quedaba el alma y esta tiene, muchas veces, sin darse cuenta, un intérprete en la mirada."

De León Tolstói, Guerra y Paz.

"La conciencia es la fuente de un autoconocimiento completamente aislado e independiente de la razón. A través de la razón el hombre se observa a sí mismo; pero se conoce a sí mismo a través de la conciencia"

Louisa May Alcott, Mujercitas.

"-¡Ánimo, corazón mío! Siempre hay luz detrás de las nubes."

Para Manuela.