Juan Manuel Díaz Caneja fue un pintor palentino. Su obra se enmarca
dentro del cubismo, siendo característicos en su temática los paisajes
castellanos.
Yo tampoco lo conocía. Vimos su pintura en la Fundación estos días que estuvimos de viaje. Algunas son muy interesantes, aunque del Cubismo no todo me agrada.
Mira tú Palencia, la ciudad discreta. Nunca se oye hablar de ella, sólo por eso tengo muchas ganas de conocerla. Ya sé una visita que tengo que hacer si al fianl lo consigo.
Pues sí, una ciudad discreta y de la que nadie se acuerda cuando tiene que hacer un viaje. Nosotros pasamos allí solamente una noche, pero es suficiente tiempo para verla. Me encantó su catedral (la desconocida) y la iglesia de San Miguel. Ah, ¡y se come de maravilla! Anímate.
Nunca había oído hablar de ese pintor. Esto de la pintura es como todo; a unos gusta y a otros no.En este caso, esta obra, la veo muy simple. Un abrazo
A min de arte, gústanme sempre...Uns máis ca outros, claro. Imaxino que algunha fábrica de galletas veriades tamén, porque eu desde nena levo vendo caixas onde pon que se fan alí. É unha das primeiras cousas que lembro ter lido cando empezaba a ler. Unha aperta
La verdad es que no vimos ninguna fábrica de galletas, pero supongo que estarían a las afueras. Yo no recuerdo lo primero que leí, pero sí muy nítidamente cuando me entraron unas ganas terribles de hacerlo; estaba "leyendo" un tebeo. Las tiras las iba deduciendo y cuando no entendía bien la historia, le preguntaba a mi hermana. Aquel día fui consciente de que me estaba perdiendo algo mágico.
Não me lembro de ter visto pinturas de Díaz Caneja, mas gostei desta natureza morta e das pinturas que vi no link.
ResponderEliminarBom domingo!
Yo tampoco lo conocía. Vimos su pintura en la Fundación estos días que estuvimos de viaje. Algunas son muy interesantes, aunque del Cubismo no todo me agrada.
EliminarUnha aperta.
Mira tú Palencia, la ciudad discreta. Nunca se oye hablar de ella, sólo por eso tengo muchas ganas de conocerla. Ya sé una visita que tengo que hacer si al fianl lo consigo.
ResponderEliminarPues sí, una ciudad discreta y de la que nadie se acuerda cuando tiene que hacer un viaje. Nosotros pasamos allí solamente una noche, pero es suficiente tiempo para verla. Me encantó su catedral (la desconocida) y la iglesia de San Miguel. Ah, ¡y se come de maravilla! Anímate.
EliminarUn abrazo.
Nunca había oído hablar de ese pintor. Esto de la pintura es como todo; a unos gusta y a otros no.En este caso, esta obra, la veo muy simple.
ResponderEliminarUn abrazo
Lógico...Para colores, flores; y para gustos ¿Cómo era el refrán?..."Para gustos colores y para colores flores"...¿Es así?
EliminarUn abrazo.
A min de arte, gústanme sempre...Uns máis ca outros, claro.
ResponderEliminarImaxino que algunha fábrica de galletas veriades tamén, porque eu desde nena levo vendo caixas onde pon que se fan alí. É unha das primeiras cousas que lembro ter lido cando empezaba a ler.
Unha aperta
Luisa
L
La verdad es que no vimos ninguna fábrica de galletas, pero supongo que estarían a las afueras. Yo no recuerdo lo primero que leí, pero sí muy nítidamente cuando me entraron unas ganas terribles de hacerlo; estaba "leyendo" un tebeo. Las tiras las iba deduciendo y cuando no entendía bien la historia, le preguntaba a mi hermana. Aquel día fui consciente de que me estaba perdiendo algo mágico.
EliminarUnha aperta.
El formato del marcapáginas no es frecuente, pero tiene su atractivo; como el cuadro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lucía.
No son ninguna maravilla; pero, como dices, tienen su atractivo.
ResponderEliminarUn abrazo.